Por N. Lauzirika vía blog DEIA
Médicos de Familia, puntualizo, porque de algunas otras especialidades que dan prestigio, lustre social y como de pasada también bastante pasta, me imagino que no.
Aunque sepa de fútbol lo que un pingüino sobre arrecifes coralinos, me soplan que de cada 1.800 niños federados solo uno llegará a profesional. Si en 2021 en la CAV más Nafarroa nacieron 19.306 niños/as, balanceando que fueran mitad-mitad ellos/ellas, suponiendo que todos quisieran jugar al futbol y que todos/as desearan ser de nuestro Athletic (lo que es mucho suponer), por cálculo matemático muy simple el Athletic necesitaría un poquito más de tres cursos natalicios completos para conformar un equipo profesional masculino y uno femenino …, eso sí, sin reservas. Como a veces veo “vascos por el mundo” y canto la letra completa del Gernikako Arbola, pues podrían reclutar vascos de allende los otros mundos. De hecho, hace unos días escuché de pasada a un responsable del Athletic femenino comentar que en su liga hace seis años había 17 extranjeras y ahora hay 179, lo que hace que sus oportunidades txapelduneras sean de cuarto menguante, y hay pocas/pocos Williams a la espera.
No hará ni tres meses leía que en el Estado dicen que hay unos 109.000 empleos que no se cubren por falta de personas cualificadas. Dicen que faltan ingenieros, técnicos, mecánicos, maquinistas navales, albañiles, ferrallistas, caravisteros… Con razón a muchos empresarios se les plantea la duda del porqué no atraen personas con talento, y me pregunto si no será porque probablemente haya pocas, con talento y sin él. Y para unas y para otras la oferta se agranda e irán adonde mayor salario les den y en la Europa rica tampoco andan sobrados de personal..
El número de alumnos que se presenta a selectividad va descendiendo año tras año paulatina pero inexorablemente y más aún el número de niños matriculados en las escuelas e institutos. En la CAV solo un 30% de los niños son de madres de menos de 30 años, edad primer-maternal que asciende de continuo; de modo que solo se producen 6,7 nacimientos cada 100.000 habitantes, seguramente el índice más bajo de Europa, que ya tiene el índice continental inferior del mundo. Menos mal que esos 3 nacimientos de cada 10 que tienen las extranjeras maquillan nuestro descenso a los avernos demográficos, y menos mal también porque los mayores se quedan entre nosotros de media hasta muy pasados los 82 años, que si no esto sería un páramo poblacional.
Y llegamos a sanidad donde los datos que nos llegan de hoy son siempre mejor que los de mañana: nos faltarán médicos, nos avisan, sobre todo pediatras y de familia, pero tampoco andaremos sobrados en enfermería ni en otros técnicos sanitarios. Y como el bajonazo demográfico europeo es generalizado y quién más pone encima de la mesa y mejor organizado tiene el sistema es más atractivo, pues se lleva el gato al agua, es decir, los profesionales volarán a su hospital o centro de salud. Y quizá nunca vuelvan.
Así que dicen que nos faltarán médicos …, e ingenieros, ferrallista, maquinistas …, o quizá, diría yo, simplemente es que nos faltarán ciudadanos/as y nos tendremos que conformar con jugar a cuatro al futbolín, eso sí, con la camiseta del Athletic.