El ambicioso proyecto de Mark Zuckerberg, fundador y director general de Facebook, y el de otros tecnólogos multimillonarios podrían cambiar radicalmente nuestras vidas en los próximos cinco o diez años, incluso antes. ¿Qué ocurrirá? (…) “Pese a estar cualquier persona muy lejos de la gente o de un lugar, podrá sentirse presente, como si estuviera allí mismo”, dijo Zuckerberg. Y añadió: «Las pantallas hoy no pueden transmitir toda la gama de expresiones y conexiones humanas. No pueden transmitir esa profunda sensación de presencia, pero la próxima versión de Internet, dentro de unos años, sí podrán»…
Por José Manuel Alonso
“Internet y la revolución de las comunicaciones” es el titular de un artículo de Miguel López-Coronado, catedrático de Telecomunicaciones de la Universidad de Valladolid, en el que escribe: “Vivimos un momento tecnológico y social en que prácticamente todo, las relaciones personales, la información en sus diferentes versiones, la interconexión con las cosas, la salud, la economía, la educación, la producción, la cultura, nuestras finanzas… dependen ya de una Red de Redes” (…)
Los mundos virtuales, un universo ficticio… y el “metaverso”
Esa denominada Realidad Virtual (RV) la definen los expertos (tecnólogos millonarios) como “un entorno de escenas y objetos de apariencia real —generado mediante tecnología informática— que crea en el usuario la sensación de estar inmerso en él. Dicho entorno se contempla a través de un dispositivo conocido como gafas o casco de Realidad Virtual”, dispositivo que nos transportará a un mundo totalmente nuevo; así como otros complementos que “nos permitirán interactuar con él y pensar que realmente estamos dentro de él, interactuando con todos sus elementos” (…) Este fenómeno inmediato se le denomina “Metaverso”, que se entiende como un “Universo ficticio” y se define como “entorno donde los humanos interactuamos social y económicamente como avatares y lo hacemos a través de un soporte lógico en un ciberespacio, el que actúa como una metáfora del mundo real, pero sin sus limitaciones” (…)
Los mundos virtuales no son nada nuevo, y existen una gran cantidad de ellos, sobre todo en el sector de los videojuegos. Tú te creas un personaje o avatar, y te adentras en ese mundo a vivir aventuras a través de tu ordenador. Sin embargo, el metaverso no busca ser solo un mundo de fantasía, sino una especie de realidad alternativa en la que podremos hacer las mismas cosas que hacemos hoy en día fuera de casa, y hacerlo sin movernos de la habitación o donde físicamente estemos…
El término metaverso viene de una novela de 1992 llamada “Snow Crash«, y es un término que se ha asentado para describir visiones de espacios de diversión o de trabajo tridimensionales o virtuales. Este metaverso, por lo tanto, significa un mundo virtual en el que podemos interactuar, y que ha sido creado para parecerse a una realidad externa. La idea sería la de crear un universo paralelo y completamente virtual, al que podremos acceder con dispositivos de realidad virtual y realidad aumentada, e interactuar entre nosotros, dentro de él y desde fuera y hacerlo con el contenido que tenemos dentro.
Por ese concepto y mundo virtual grandes empresas como Facebook o Google, Nvidia y Microsoft están decidiendo apostar hasta tal punto que Facebook ha cambiado el nombre por el de Meta… No se trata de ningún tipo de concepto nuevo, y ya hemos visto coqueteos con él en el mundo literario y cinematográfico, con películas de ciencia ficción como Minority Report, Ready Player One o Los Sustitutos… Sin embargo, lo cierto es que hoy en día es una tecnología totalmente mimetizada con nuestra vida diaria y ha llegado para quedarse. Gracias a esa Realidad Virtual podremos sumergirnos en videojuegos como si fuéramos los propios personajes, aprender a operar un corazón, o mejorar la calidad de un entrenamiento deportivo para obtener el máximo rendimiento, además de otras muchas posibilidades comunicativas….
Qué puede ofrecernos el Metaverso, sucesor del Sensorama
Todo esto puede parecer extremadamente futurista, pero la realidad es que no tiene un origen tan reciente como podríamos pensar. De hecho, muchos consideran que uno de los primeros dispositivos de Realidad Virtual fue la denominada Sensorama, una máquina con asiento incorporado que reproducía películas en 3D, emanaba olores y generaba vibraciones para hacer la experiencia lo más vívida posible… El invento se remonta nada más y nada menos que a mediados de los años 50. A partir de ahí, el desarrollo tecnológico y de software en los años siguientes trajo consigo las evoluciones pertinentes tanto en dispositivos como en el diseño de interfaces. El Sensorama fue uno de los primeros ejemplos conocidos de inmersión, multi-sensoriales, ahora conocido como la tecnología multimodal. Su creador fue Morton Heilig (1926,-1997) filósofo, inventor y cineasta al que le gustaba mirar hacia el futuro, y en 1957 creó ese Sensorama, que en su patente de 1962 definía como «un aparato (con pantalla) para estimular los sentidos de un individuo y simular una experiencia de forma realista» (…)
Ahora, ya, sesenta años después de ese aparato creado por Morton Heilig, lo que está de moda y cuenta con un largo futuro es el Metaverso, es decir, esa realidad paralela en la que nos podemos sumergir a través de la realidad virtual, aunque yo entiendo mejor que se trata más bien de una simulación más que una realidad, ya que es una tecnología informática que tiene como objeto crear un entorno simulado. Y eso situará a los usuarios en una experiencia distinta a las interfaces tradicionales. Eso sí, sus usuarios estarán sumergidos y podrán interactuar en mundos tridimensionales más que en ver solo una pantalla frente a ellos mismos.
“De un simple Internet… a miles de encuentros y actividades”
Por todo lo dicho y a través de la estimulación de los sentidos, y del poder, incomprensible, de ver, oír, tocar y oler, el ordenador se transformará en una puerta de entrada a un mundo artificial. Y los únicos límites que habrá en este sentido serán las disponibilidades de contenidos y la capacidad del ordenador. Y los expertos en la materia coinciden en qué dentro de un tiempo, todo lo que pueda imaginarse podrá crear y vivirse como si se estuviera allí, lógicamente sin estarlo físicamente. El metaverso se trata de un internet inmersivo que nos espera en muy poco tiempo porque no para de crecer… Para entender mejor qué es ese metaverso, podemos (quien pueda) adentrarnos en las tecnologías que ya están aquí para revolucionar nuestras vidas y adentrarnos en él para esos mundos y entrevistas virtuales…
Será otro mundo paralelo que se dice va a valer para casi todo, ya que podremos estar en una entrevista, pero también en una clase o dirigiendo una operación o jugando con otras personas… Esta nueva realidad (virtual) te va a permitir hacer muchas otras actividades, como estar en cualquier lugar sin moverte de casa, y trabajar con los compañeros como si estuviéramos en la oficina…
Esa es la gran diferencia: pasaremos de un simple Internet de la información a uno de muchas actividades, con presencia en ese otro mundo… Y es que las grandes marcas, por lo que se ha dicho, toman posiciones en un metaverso que elevará Internet a otra dimensión… Incluso se habla de que gracias a Metaverso se invertirá su espacio para conocer la vida real y lo haremos también con criptomonedas, ya que el metaverso podrá tener su propia economía, y lo haría con ese tipo de moneda virtual (criptomoneda) que podremos comprar con nuestro dinero real, o ganar de alguna manera dentro de las interacciones que ofrezca su actividad, incluso podrán crearse puestos de trabajo. «¿En qué trabaja tu sobrino? Es el encargado de una tienda virtual en el metaverso».
Y esto, se asegura, generará un montón de puestos de trabajo que están aún pendientes de definir: constructores de metaverso, diseñadores de metaverso, y poco a poco irán llegando los psicólogos, los abogados, los periodistas que sabrán utilizarlo y beneficiarse de él… El punto de inflexión del Metaverso se espera que llegue con los espectáculos, incluso con una nube capaz de soportar muchísima demanda gráfica e información.
Desde luego, el Metaverso será el próximo gran salto evolutivo de Internet… Empresas como Meta (antes Facebook) está ya seriamente comprometida y anuncia fuertes inversiones para convertir la Realidad Virtual en algo real, extendido la por todo el mundo, y a ella se unirán (si es que no se han unido ya) otras empresas para crear todas as tecnologías que lo hagan posible…
Tal y como se ha escrito por la misma empresa, Meta (Facebook) espera que el metaverso pueda ofrecer tantas oportunidades como el mundo físico real, con la posibilidad de crear nuestros propios negocios en él. “Imagínate poder caminar por las calles de la ciudad tecnológica Xataka, y poder charlar con los avatares virtuales de otras personas, que han abierto unas tiendas y nos ofrecen poder probarnos y comprar ropa virtual, un coche virtual, o un apartamento virtual. Y también puede tener aplicaciones prácticas, como reuniones de trabajo en la que todos compartan una oficina virtual conectándose desde sus casas, y ni siquiera tengan que preocuparse por arreglarse para la reunión. Da igual si estás en pijama o despeinado, lo que el resto de personas verá será tu avatar, tu personaje virtual.
Por último, buscando algo más cercano y humano, también nos permitirá interactuar con personas que están físicamente lejos de una manera más realista, mirándonos a nuestros ojos virtuales y a nuestras gesticulaciones reproducidas por los sensores del casco de realidad virtual que llevemos. Podremos hablarnos, podremos pasear por mundos virtuales, y no importará desde dónde nos conectemos. Incluso podremos expresarnos como realmente nos sentimos interiormente.
Piensa en cómo es Internet ahora. Está lleno de comunidades virtuales, redes sociales a las que accedemos desde diferentes dispositivos. Interactuamos con más personas de forma virtual que de forma física. Pues el metaverso sería dar un paso más para estrechar el mundo físico y el virtual, mezclándolos ambos en un universo nuevo administrado por la empresa que consiga imponer su metaverso. Por tanto, todavía estamos muy lejos de poder conectarnos todos a un metaverso en el que interactuar. Falta aún desarrollar ese universo virtual, y la tecnología que haga posible que nos conectemos a él. También hace falta hacer que, cuando exista, esa tecnología sea asequible para todos.
¿Hacer cualquier cosa que puedas imaginar?…
En suma, a día de hoy el metaverso es un concepto, una idea, y un lienzo en blanco. Va a tener muchas posibilidades, pero todo dependerá de la voluntad que haya para crearlo, del camino que se siga para hacerlo, y de lo accesible que sea para todos. Porque esa es otra de las claves, que todos podamos disfrutar o beneficiarnos de él. Y so parece muy posible porque hoy, ya hoy, la mayoría de las personas pasamos gran parte de nuestras vidas en línea; 6 horas y 42 minutos al día como promedio, según un estudio reciente, y según Zuckerberg, «la próxima plataforma y el medio serán aún más inmersivas. Un Internet encarnado, en el que uno está en la experiencia, no sólo mirándola. Y a todo esto lo llamamos ya el Metaverso. Y a través de él, dicen los entendidos, podremos hacer casi cualquier cosa que puedas imaginar» (…)
Termino como empecé, con Mark Zuckerberg: «Cuando envíe a mis padres un video de mis hijos, van a sentir que están en el momento con nosotros, no mirando a través de una pequeña ventana (…) Cuando juegues a un juego con tus amigos, sentirás que estás ahí mismo, juntos, en un mundo diferente, no solo en tu ordenador. Y cuando estés en una reunión en el Metaverso, sentirás que estás en la misma sala, haciendo contacto visual, teniendo una sensación de espacio compartido y no sólo mirando una cuadrícula de caras en una pantalla. Eso es lo que queremos decir con un Internet encarnado. En lugar de mirar una pantalla, vas a estar en experimentando sensaciones y actividades nuevas” (…)
Nuestra crítica humana contra el Metaverso… y sus consecuencias
He preferido no intervenir en todo el artículo, dejándoles hablar a los expertos del Metaverso, que aseguran que esa nueva realidad virtual podrá ayudarnos a resolver problemas del futuro y traer distinta prosperidad de la que podamos o hayamos comenzado a imaginar… Para este periodista, el Metaverso no resolverá todo cuanto dicen los que están en ello, y creará además algunas dificultades imprevistas, así como efectos muy negativos, superando a cualquier otra tecnología. Si este nuevo fenómeno virtual se extendiera tanto como aseguran, mi pregunta es: ¿Y dónde quedará la relación humana, el abrazo real, el apretón de manos, la caricia, la lágrima, la vida física y directamente compartida, el sufrimiento en compañía, e incluso el amor? ¿Qué ocurrirá en las calles, en los lugares de encuentro vivos, en la participación real sin engaños ni aditivos?… Personalmente, he de decir y ojalá me equivoque, que si vivo cuando se utilice el Metaverso no lo necesite ni para relacionarme, ni para gozar, sufrir o participar de la vida, ni para seguir escribiendo, y que, en lugar del Metaverso y la realidad virtual, utilice la Metaprosa y la realidad física y humana, el abrazo y la lágrima, o la emoción directa y sentida… Que así sea…