Asociación Vasca de periodistas - Colegio Vasco de periodistas

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Periodismo, ciencia y conciliación: unas sinergias tan difíciles como necesarias o cómo mezclar aceite y agua

Carmen Peñafiel Saiz

Catedrática del Departamento de Periodismo.

Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea.

Vicepresidenta de la Asociación Española de Investigación de la Comunicación;

Secretaria General del Colegio Vasco de Periodistas

Amaia Goikoetxea

Periodista y Decana del Colegio Vasco de Periodistas

Artículo  publicado en el libro  “Periodismo y conciliación. Reflexiones de aquí y allá” por  el servicio editorial de la UPV/EHU.

Cuando comenzamos a trabajar como periodistas hace 40 años, la conciliación parecía un tema exclusivamente de la mujer. Desde entonces y hasta ahora sigue siendo uno de los factores que des- encadenan la desigualdad de oportunidades entre hombres y mujeres en la vida laboral sea el sector que fuere. Es cierto que se han realizado grandes esfuerzos, pero todavía existen defectos que inci- den en la vida profesional de las mujeres.

En profesiones como la nuestra, en las que la vocación juega un papel tan importante, el ni- vel de entrega e implicación para hacer bien nuestro trabajo exige horarios y condiciones que en ocasiones dificultan conciliar nuestro trabajo con cualquier actividad o relación más allá de ese ámbito.

Aun así, aun no siendo fácil, se puede y se debe intentar porque detrás del buen perio- dismo debe haber equilibrio y estabilidad, empatía, fortaleza emocional, sensibilidad, hondura, valentía… y eso mana de una vida familiar sana, de sacar tiempo para alimentar una red satis- factoria de amistades, tiempo para el deporte, para la naturaleza, para la solidaridad… y, por supuesto, tiempo para uno/a mismo/a, para parar, mirar, digerir, para reflexionar y pasar a lim- pio lo vivido.

CARMEN PEÑAFIEL SAIZ, AMAIA GOIKOETXEA

La conciliación no es fácil, pero…

Para quien busque una actividad profesional con horario cómodo de oficina, el periodismo o cualquier otra profesión vocacional, no será nunca lo suyo. Que abandone la idea de ser un buen pe- riodista ya que la responsabilidad, el compromiso y el rigor que requiere esta profesión nos exige lo imprevisible, lo inesperado.

No conozco nada que merezca la pena en esta vida que no cueste o incomode, pero el esfuerzo siempre merece la pena. Los retos y dificultades nos fortalecen, nos forjan como seres humanos, como sociedad, como ciudadanía.

Somos periodistas ahora, en tiempos de crisis, incertidumbre y cambio de modelo. Pero te- nemos una gran responsabilidad: somos garantía de calidad y rigor frente a la mentira, los bulos y la manipulación. Nos hemos dotado de la formación y el conocimiento necesario para una profe- sión de gran relevancia social, imprescindible para el respeto a la libertad, los Derechos Humanos, la transparencia y la democracia. Y eso, requiere tiempo, mucho tiempo.

Para trasladar todos los detalles de la realidad, para desarrollar esa labor pedagógica derivada de lo que somos, un servicio público, necesitamos entrega y mucha comprensión y ayuda de nuestro entorno. Necesitamos ganarnos el prestigio que nos merecemos, dotarnos de recursos y servicios que nos ayuden a la difícil pero no imposible, la siempre necesaria conciliación.

La vida académica y la ciencia

La vida académica en la universidad pública exige el cumplimiento de múltiples facetas: do- cencia, investigación, transferencia y gestión. Además de ser buenas docentes, con una perspectiva de reciclaje, innovación, adaptación a las nuevas tecnologías y metodologías docentes, las mujeres cumplimos también con una investigación de calidad y con la gestión científica y académica. Por ello, superamos con creces el tiempo dedicado a una jornada laboral, tal y como marca la ley para fun- cionarios, con horas extras no remuneradas a costa de nuestro tiempo de descanso y de ocio: horas nocturnas, fines de semana, tiempo de vacaciones, etc. con el fin de cumplir nuestros compromisos de fechas y plazos en la realización y entrega de artículos, proyectos de investigación, congresos na- cionales e internacionales, estancias de investigación (preferentemente internacionales), por seña- lar lo más destacado.

Todavía recuerdo mis estancias de investigación e innovación docente realizadas fuera del país con mis hijas pequeñas a quienes llevé conmigo a Noruega, México, California, Nevada… Las escola- rizaba para poder realizar mi trabajo, integrándose perfectamente en cada país. Esos viajes fueron un plus en su formación y hoy son dos mujeres jóvenes graduadas, con másteres, con 3 y 4 idiomas, trabajando en sus especialidades desde que finalizaron sus estudios universitarios.

Es un modelo de vida con una serie de particularidades y obligaciones que llevamos de forma voluntaria porque nos gusta la carrera académica, la enseñanza universitaria, la profesión periodís- tica y el valor que devolvemos a la sociedad. Nuestra profesión está llena de valores intangibles y, en muchos casos, con dedicaciones altruistas en instituciones públicas que creamos, mantenemos y de- sarrollamos.

PERIOdISMO, CIENCIA y CONCILIACIÓN

La igualdad entre géneros y el empoderamiento de la mujer sigue creciendo y contribuirá de- cisivamente para que el acceso y la participación sea plena, en condiciones de igualdad en la cien- cia, la tecnología y la innovación porque el reconocimiento de la mujer es clave en la comunidad científica y tecnológica. Las mujeres y las niñas constituyen la mitad de la población mundial y, por consiguiente, la mitad de su potencial, pero todavía hay numerosas barreras para que las mujeres desarrollen una carrera científica en igualdad de condiciones que los hombres y, por ello, uno de nuestros objetivos debe ser potenciar la conexión entre la ciencia y la sociedad. También tenemos como tarea pendiente visibilizar, revalorizar y replantear el papel de las mujeres en las Ciencias So- ciales y las Humanidades, con el fin de mejorar la transformación de nuestras sociedades de una ma- nera más equitativa y justa. La igualdad de género es un derecho humano fundamental para el de- sarrollo sostenible.