Por José Manuel Alonso
“La propaganda es una actividad que pretende inducir a otros a comportarse de una manera determinada, distinta a la conducta que hubiesen –probablemente— adoptado sin su existencia… Tanto la persuasión como la propaganda tratan de adueñarse de la voluntad de los receptores… Aristóteles escribió el primer tratado completo sobre el arte de la propaganda. Su “Retórica” sigue siendo aún hoy una guía imprescindible para la persuasión oral” (…) // “En la lucha ideológica actual es posiblemente la propaganda la más importante de las relaciones de nuestros partidos políticos con los ciudadanos que les pueden votar… (Distintos autores) // “Una mentira, si se repite mil veces, se convierte en verdad” (Joseph Goebbels)
La propaganda, cuya finalidad es convencer e incluso engañar a los demás, es uno de los fenómenos dominantes en la actualidad… Sin la propaganda política serían inconcebibles, ñor ejemplo, las grandes conmociones de nuestra época, la revolución comunista y el fascismo… Fue en gran parte gracias a ella que Lenin pudo establecer el bolchevismo; y esencialmente a ella Hitler debió sus victorias, desde la toma del poder hasta la invasión del 40… Precisamente esos dos hombres han marcado más profundamente, aunque de manera muy distinta, nuestra reciente historia, y fueron, antes que hombres de estado y jefes militares, dos genios de la propaganda que proclamaron la supremacía de esta arma moderna. «Lo principal –dijo Lenin– es la agitación y la propaganda en todas las capas del pueblo”. Hitler, por su parte, afirmó; «La propaganda nos permitió conservar el poder y nos dará la posibilidad de conquistar el mundo” (…)
El ejemplo histórico más claro e inteligente: el de Napoleón
Desde que hay rivalidades políticas, es decir, desde el comienzo del mundo, la propaganda existe y desempeña su importante papel. Por ejemplo, fue una verdadera campaña de propaganda la que Demóstenes realizó contra Filipo, o Cicerón contra Catilina… Pero de todas las propagandas habidas a lo largo de la historia del mundo, hay una que marca un carácter extraordinario: la de Napoleón Bonaparte, con esta idea: “Yo no soy malvado, soy vencedor” (…) El ciudadano corso sabía que la fuerza militar no bastaba para subyugar a un pueblo. Y estas fueron sus otras palabras: “La fuerza debe estar fundamentada en la opinión… ¿Qué es un Gobierno?… ¡Nada, si no tiene la opinión de su parte” (…)
Napoleón controló la prensa y se restringieron opiniones disidentes desde los primeros días de su régimen… Fue el primero en utilizar la prensa como medio de propaganda, aprovechándola como instrumento de dirección militar y política. Un contemporáneo de su época escribía que “Es un hecho nuevo en la historia que un soberano se dirija directa y frecuentemente al público. Napoleón ha instaurado este método y sacó de él grandes ventajas” (…) Y nuestra pregunta de hoy, es: ¿A que nos recuerda esto; cuántos dirigentes que gobiernan en la actualidad no controlan la información y opinión vengan del medio que vengan?… Napoleón comprendió perfectamente que un gobierno debe preocuparse, ante todo, ¡por obtener el sentimiento afirmativo de la opinión pública para sofocar la oposición y levantar la moral!… La propaganda es una tentativa (ciencia) para ejercer influencia en la sociedad y lograr de ella una conducta determinada y favorable a quien la ejerce… Toda la habilidad de la propaganda y/o toda imposición, consiste en hacernos creer que esa persona que gobierna en toda comunidad, empezando y terminando por el Estado, nos “representa” no sólo al defender nuestros intereses sino al asumir nuestras pasiones, preocupaciones y esperanzas… Es decir, a controlarnos…
El ejemplo más claro del éxito persuasivo de Napoleón fueron sus palabras de aliento, palabras como estas: “Soldados, estáis desnudos y mal alimentados. Yo os llevaré a las llanuras más grandes del mundo… Ricas provincias y grandes ciudades caerán en vuestro poder. Allí encontraréis honor, gloria y riqueza” (…) Incluso prodigó sus dotes de persuasión para convencer a los italianos y a un buen número de españoles de que él no venía como conquistador sino como libertador (…) El historiador portugués Teixeira de Pascoaes dirá de Napoleón que “es el único personaje de la historia humana que siendo el mayor guerrero fue el más poético: un poema humanizado” (…) Solo así se puede explicar el retorno triunfal de Napoleón a París después de su huida de la isla de Elba el 23 de febrero de 1815…
Precisamente, la historia del mundo tiene una de las famosas frases napoleónicas entre las más influyentes, pronunciadas en El Cairo: “¡Soldados! ¡Desde lo alto de esas pirámides, cuarenta siglos os contemplan!” (…) Y completó su lección propagandística una vez lograda la victoria: “Adoro a Dios más que los mamelucos y respeto a su Profeta y al glorioso Corán… Los franceses son también musulmanes sinceros” (…) Y en numerosas ocasiones alentaba a sus soldados con estas palabras: “¡Soldados!: entre vosotros no hay uno que quiera volver a Francia por otro camino que el del honor” (…)
En resumen, Napoleón utilizó arengas cuyo estudio nos permite entender su enorme talento propagandístico, y, desde su nombramiento como Primer Cónsul de Francia, se adueñó completamente de los medios de comunicación… Los periódicos hostiles a sus empresas fueron prohibidos de inmediato, suprimiendo sesenta publicaciones parisinas. El resto, unas trece en total, sufrió una censura durísima que evitaba toda crítica… y así se mantuvo desde que fue proclamado emperador, el 18 de mayo de 1804 hasta el 7 de julio de 1815, fecha de la entrada de las fuerzas del rey Luis XVIII a París… y, como Beethoven, muchos europeos, no solo franceses, se dejaron inicialmente engañar por la propaganda napoleónica… Una propaganda que procedía del arte, y no hay más que contemplar las pinturas en las que aparece este personaje…
“¿Qué es un gobierno?”, se preguntaba Napoleón. Y contestaba: “Un fracaso, incluso nada… si no cuenta con la opinión” (…) Y por eso se establecía una jerarquía de la información. Ciertas noticias eran totalmente censuradas… Y otro detalle más: aceptó el hecho de la Iglesia católica, pero para ponerla a su servicio… Y con respecto a España, la invasión provocó una gran efervescencia propagandística, que no le valió demasiado… aunque fuera verdaderamente original, innovadora, de una eficacia hasta entonces inusitada… Con todo, Napoleón dejó una huella perdurable, indispensable para comprender incluso el mundo de nuestros días…
La de Hitler fue “propaganda planificada”
Según el intelectual John B. Thomson, Hitler comparte con Julio César y Napoleón no solo el haber hecho uso masivo de nuevos métodos de propaganda sino también el “haber basado, consciente y deliberadamente, toda su carrera en la propaganda planificada” (…) Y aunque la vida pública de Adolf Hitler es inseparable de su actividad propagandística, la huella que dejó Napoleón como heredero de la Revolución Francesa, en Europa y en su patria, a pesar de lo efímero de sus conquistas, fueron obras humanas infinitamente más trascendentales que la de Adolf Hitler…
Y la realidad es qué de Julio Cesar, Napoleón y Hitler… La de mayor duración con mucho (como mínimo medio milenio) fue la de Julio Cesar… En el caso de los tres, como se ha escrito, se trataba de convertir en la imaginaria de la gente a una persona “humana” en algo “superior”, sobre todo en el caso del führer Hitler… Y si Napoleón utilizó la prensa como medio más eficaz; Hitler lo hizo con la radio; y hoy en día, los líderes propagandísticos que abundan, incluidos los más cercanos, utilizan sobre todo la televisión, además de otros medios más modernos, y tienen la propaganda y el control informativo como norma obligada para intentar mantenerse en el poder…
Putin sorprende y rompe con el compromiso nuclear
El último caso escandaloso que se está produciendo de la propaganda es el de Vladimir Putin, que como presidente de Rusia ha desatado la guerra más global desde 1945, ya que, aunque sus ataques son solamente y de momento contra Ucrania, tanto a este país como al suyo le apoyan otros muchos… Y lo cito en este mi artículo de hoy por su última intervención o discurso, con su consiguiente celebración posterior, a base de una propaganda muy especial… Trató de convencer a toda la población rusa de cuanto está haciendo o piensa hacer mientras sigue persiguiendo a los que en su país se oponen a la guerra, que les cuesta, por lo menos, diez años de cárcel…
El discurso propagandístico del 24 de febrero coincidió al cumplirse el año en que Vladimir Putin lanzaba el mayor golpe a la seguridad europea desde la Segunda Guerra Mundial, atacando a Ucrania, y a esa guerra, que, desde su comienzo, el líder ruso la llamó cínicamente: “operación especial”, y confiaba en que fuera relámpago. Ahora, el conflicto parece enquistado… y muy próximo a la frontera de Polonia, que si la traspasa entraríamos de nuevo en una guerra mundial…
En cuanto al discurso propagandístico de Putin el pasado 21 de febrero, durante dos horas y un día después de la visita del presidente de EEUU, Joe Biden a Ucrania, donde fue recibido por su homólogo ucraniano Volodímir Zelenski, asistimos a una lección oral de propaganda del presidente ruso… Su discurso estuvo dedicado principalmente a justificar la guerra y su enfrentamiento con Occidente… Lo más sorprendente de esta supuesta larga lección comunista fue, a nuestro entender, lo referente a la religión ortodoxa y a la defensa de la vida, de la familia y, sobre todo, a la época infantil, a los niños y su educación… “Debemos proteger -dijo- a la infancia” (…) Y, como es lógico, atacó a cuanto está ocurriendo en el comportamiento de los políticos de Estados Unidos, así como de los países, principalmente de la Comunidad Europea, que dependemos en gran parte del juicio y la alternativa norteamericana, y sobre todo de tres o cuatro iluminados explotadores, que aparentemente nada tienen que ver con la política…
Estamos en grave peligro del uso de armamento nuclear
En el discurso, realizado a todos los representantes de las Cámaras y Ejércitos soviéticos, Vladimir Putin anunciaba que suspende el Tratado Internacional de Desarme Nuclear, y culpa a Estados Unidos de todos los actuales males del mundo, así como de los nuevos valores totalitarios, poco sociales, de Occidente, y concretamente de los países de la Europa Occidental…
De su intervención propagandística, lo más sorprendente para este periodista fueron las palabras en las que señaló hechos que se están produciendo gravemente en países como España, donde hay abundancia de comunistas e que incluso gobiernan en la actualidad. Se refirió en concreto a perversiones de carácter sexual como la pedofilia, la homosexualidad, incluso a las personas satánicas… Y añadió: “La verdad está de nuestro lado, no del de Occidente”, al que acusó de avivar una nueva guerra mundial para vencer a Rusia, lo que, según él, no se ha producido nunca y ni se producirá en un futuro…
Todo ello nos hizo pensar que los comunistas en nuestro país, el caso de Podemos y otros partidos de izquierda, que defienden o respetan la bestial e incomprensible guerra emprendida por el mismo Putin contra Ucrania, están profundamente equivocados sobre sus teorías políticas, despreciando el valor de la familia, la infancia y la educación, lo que no hizo el líder ruso, al que se supone que admiran…
En todos los tiempos, incluidos los del presente, los políticos, los hombres de Estado y los controladores sociales han tratado de lograr la adhesión a su persona y/o a su sistema de gobierno. Y entre las últimas noticias respecto al conflicto mundial en el que estamos sometidos, las delegaciones de Rusia y China en la ONU han rechazo el término “guerra” a la invasión de Ucrania, a la que denominan “operación militar especial” (..). Y todo eso justifica el impacto desestabilizador de la economía en el mundo…
Peculiaridades de la propaganda en la actualidad
En todo caso, todas las necesidades de la propaganda exterior que surgieron en el pasado, nos ayudan a comprender mejor las particularidades del presente. Y pese que hay historiadores que afirman que la propaganda política organizada en el ámbito internacional existe desde hace milenios, hay otros que afirman que solo después de la Primera Guerra Mundial (1914-1918) se inició la “diplomacia política”, que duró tan solo unos veinte años de la Segunda Guerra (1939-1945) … Eso sin entrar en la propaganda de determinados países, comarcas, ciudades, pueblos, en los que se ejerce hoy esa forma comunicativa en todo el mundo…
Recientemente, el presidente Pedro Sánchez visitaba Ucrania y, además de ofrecer carros de combate que tiene almacenados y debe repararlos, adelantaba que estudiaría el envío de aviones de combate, y todo ello lo hace sin que consulta en el Parlamento porque sabe que ahí perdería la ocasión de ayudar a los ucranianos, convirtiéndose España en el único país de Europa que no ayudaría a Ucrania contra Rusia…
En definitiva, con todo lo dicho, hoy, la buena propaganda junto a la imagen que se cree, es clave para ganar unas elecciones políticas o para mantenerse en el poder, no solo en el político… Lo único cierto un año después del comienzo de la guerra en Ucrania es que su líder, pese a los miles de muertos y ocho millones de ciudadanos que han emigrado, sigue diciendo que “Ucrania está viva” (…) Y lo único cierto también es que es vivimos una guerra sin señales de que pueda terminar pronto ni tampoco de cómo vaya a terminar… Y esto ocurre, repito, con el convencimiento de Putin de que Rusia nunca a lo largo de su historia ha sido derrotada…Y lo que nos gustaría que ocurriera es que, como ocurrió en la Guerra de la Independencia española contra Napoleón, se convirtiera en guerra de liberación del pueblo agredido, Ucrania… Que así sea…
José Manuel Alonso
Nota.- El autor del artículo hace unos años escribió varias obras de teatro, entre las que hay dos dedicadas a la Guerra de la Independencia, con dos de los personajes claves: Napoleón y Francisco de Goya, del que André Malraux dijo: “Después de Goya, empieza la pintura moderna”. El título de la obra dedicada a Napoleón es: “Amnistía conquistada”. Y la obra dedicada a Goya: “Libertad o muerte” (…) Ninguna de las dos se ha representado todavía…