Por Julio Flor
Julio Flor / Bilbao 2014
Hablamos sentados a la mesa después de comer dos menús del día. Durante la comida, Carlos Jiménez Villarejo se relaciona con cordialidad y buen humor con las dos personas que esa mañana trabajan en el restaurante del hotel.
Escuchando las preguntas que hace a los trabajadores -uno de ellos en prácticas-, con esa calidez suya, pienso que el ex Fiscal Especial Anticorrupción pudo tener sutiles tentaciones para caer en las redes de los poderosos que investigaba. Mas nunca pescaron a este delfín libre. No hablaremos de esto en nuestra conversación, pero esa es la prueba que él ha superado, el desafío del “qué nos pasa cuando tenemos poder”.
Hace diez años que nos conocemos. Hemos estado juntos en Barcelona, en Vitoria, en Donostia y en Bilbao. Está siempre igual de vivo y al día, plantando cara desde los Medios de Comunicación (artículos, conferencias, entrevistas, libros) a la corrupción política, económica y financiera.
CONTRA EL SILENCIO DEL AYER
Un libro le ha traído a Euskadi: “JUECES, PERO PARCIALES. La pervivencia del franquismo en el poder judicial” (Edit. Pasado&Presente), que ha escrito con el magistrado Antonio Doñate Martín. Es un libro contra el silencio del ayer. Ese río de solidaridad humana habita en sus páginas para que nadie organice el olvido de nuestra reciente historia.
Hay otra cosa que he de decir antes de pasar a la conversación. Carlos está a punto de cumplir 79 años. Tiene hijos -el mayor de 50 años-, nietos y nietas. Hay algo que le mantiene joven y fresco de verdad. No sé qué es. Pero lo veo en cómo se relaciona, en cómo lucha, de qué manera se manifiesta en la calle, en sus preocupaciones ante el desempleo-los desahucios-la sanidad-la educación, en su valentía y su coraje. En cómo sonríe, que eso es muy importante en él. En sus llamadas de profundo afecto a su esposa Aurora. En su lucha contra la tortura, la solidaridad con las víctimas del franquismo, en su afán contra los paraísos fiscales y la justicia universal…
Carlos es un ser excepcional en su profesión, porque sigue ejerciendo moral y éticamente como el gran Fiscal que ha sido en estos temas claves para nuestra época. Excepcional en sus valores. Os aseguro que peso cada palabra. Excepcional en su forma de ser.
EL PERIODISMO MIRA DESDE 2023 LO QUE ACONTENCÍA EN 2014…
.- Bárcenas fue senador del PP, y está en la cárcel. ¿Qué nos dice ese dato, entre otros, del ex tesorero del partido que gobierna España con mayoría absoluta?
Bárcenas es hoy un ex cargo público del PP, que ha hecho compatible tener un tesorero delincuente que al mismo tiempo ocupaba un puesto en la más alta representación del Estado. Para entonces ya había comenzado su carrera delictiva, y la prueba es que su primera declaración como imputado y como delincuente la hizo ante el Tribunal Supremo porque era senador. ¿Qué ocurre? Sencillamente que es perfectamente compatible realizar actividades presuntamente delictivas y al mismo tiempo ocupar un alto cargo de la Administración del Estado, lo cual es una verdadera catástrofe para el sistema representativo, porque los ciudadanos eligieron a ese individuo para que fuera senador. En el Senado hay listas abiertas, por lo tanto fue elegido con su nombre y apellidos. Esto pone en cuestión la propia ley electoral, el propio sistema de acceso a cargos representativos, y las propias bases del sistema democrático que es la representatividad.
UNA CIUDADANÍA VIGILANTE CON LOS PODEROSOS
.- Contra la corrupción ¿no vamos a poder? Cuando digo “no vamos a poder”, no me refiero a lo que usted o yo podamos hacer, sino a las instituciones del Estado. Y si no vamos a poder, ¿por qué no vamos a poder?
Yo sí creo que se puede. No quiere decir que vayamos a poder. Se puede, pero hace falta una ciudadanía y unos partidos políticos de izquierda más vigilantes del poder. Vigilantes para no pasar ni una sola irregularidad que huela a corrupción, por pequeña que sea. Ni tráfico de influencias, ni favores, ni beneficios irregulares. Por otra parte, hace falta una capacidad de reacción de la ciudadanía ante la corrupción conocida, una ciudadanía menos resignada y más concienciada. También necesitamos un poder judicial –con las excepciones que haya que hacer- más consciente de lo que nos jugamos como Estado ético y social. Necesitamos jueces más comprometidos con la causa de la libertad y la democracia. En esto falta un camino por andar.
.- ¿Qué edad tenía cuando accedió por vez primera al Ministerio Fiscal?
En la Barcelona de 1962 yo tenía 26 años, en plena dictadura. Entonces no había libertad de prensa, con lo cual la información sobre la corrupción no existía. Pero la corrupción la ejercían los gobernantes franquistas a través de sus múltiples conexiones del poder político y el económico financiero. Todo quedaba oculto por el propio sistema dictatorial, pero había una gran corrupción. Fueron muchos los que se hicieron ricos. Como dijo un famoso escritor: “se hicieron ricos por la patria”. Por entonces yo era aún fiscal de base y no podía tomar iniciativa alguna. Lo que sí percibíamos era la tortura, que eso sí lo detectábamos.
.- ¿Cuál le parece la más grave corrupción, la más imperdonable?
No perdono que se aproveche cualquier cargo público, sobre todo si es representativo. Distingo entre los cargos públicos que son consecuencia de una elección ciudadana, y aquellos cargos públicos que son ejecutivos, designados para ocupar un cargo determinado. Lo que no admito es que alguien que ha sido elegido por los ciudadanos, y ha sido colocado en un servicio privilegiado de poder, carezca de principios éticos y abuse de su posición para beneficiarse económicamente o beneficiar a su partido, me es indistinto. Aunque diría que es más perturbador para el sistema contribuir a financiar ilícitamente a su partido, porque corrompe al propio sistema.
“LA MONARQUÍA HA SIDO DESLEGITIMADA”
.- Cincuenta y dos años después de su toma de posesión como Fiscal, ¿se puede decir que contemplamos toda la corrupción, o aún existe mucha que permanece oculta?
Creo que hay una parte muy importante de la corrupción que aún no ha trascendido. Creo que la corrupción que conocemos es tan sólo la punta del iceberg. Afirma el Gobierno que acaba de aprobar una Ley de Transparencia, pero todo es mentira. Porque ¿cuándo un ciudadano podrá acceder a un archivo para conocer los antecedentes familiares de las víctimas del franquismo? Si acaso podrá hacerlo un historiador legitimado por esta o aquella administración. ¿Cuándo un ciudadano podrá saber lo que gana aquel que le representa en el Ayuntamiento con exactitud matemática, incluidas las dietas que percibe -y que seguramente no debía percibir porque son una retribución complementaria-? Eso resulta prácticamente imposible. Y luego están los favores, el tráfico de influencias, las dedicaciones exclusivas injustas, y otras maneras que no son valoradas como corrupción, pero que en la práctica lo son. Par eso debiera saberse con qué patrimonio accede al cargo, y con qué patrimonio lo abandona unos años después el cargo.
.- Es aquello de “no me hable de su patriotismo que no me interesa, hábleme de su patrimonio, que eso sí me interesa”.
Eso es. Exacto.
.- Hemos empezado hablando de Bárcenas, pero podemos hablar de otros casos que están en las portadas de los periódicos: el banquero Miguel Blesa, Urdangarin, la infanta Cristina, etc. ¿Hay entre todos ellos un caso paradigmático que nos lleva a conocer el alma negra de nuestro país?
Hay muchos casos, es verdad, y más que no conocemos aún. Pero el caso más emblemático es que un ciudadano casado con una hija del Rey de España, por tanto perteneciente al núcleo duro de la Monarquía, esté hace tiempo imputado por corrupción. Si además de esto ha de declarar como imputada su esposa, la hija del Rey, eso alcanza de lleno a la institución monárquica, y la desautoriza y la deslegitima. Cualquiera que sea lo que resulte luego, me da igual.
.- ¿Y eso cómo cree que va a prosperar?
Soy bastante pesimista de que al final haya un juicio justo y una sentencia justa.
.- El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, dijo en una cadena de televisión que él cree que la Infanta saldrá limpia de su paso por la justicia
Puede que haya posibles complicidades que ignoro, pero en todo caso yo soy pesimista. Si soy pesimista de algo que tiene nombres y apellidos tan importantes para las instituciones de este país, eso ya significa el grado de desconfianza que tenemos en nuestras instituciones judiciales. Además, hay algo muy importante a destacar. En estos momentos hay en la Audiencia Nacional seis entidades de Cajas de Ahorros con causas penales abiertas por delitos diversos: por la administración desleal de sus respectivas sociedades, por la emisión engañosa como producto financiero de preferentes y deuda subordinada, que han causado un perjuicio inmenso a miles y miles de personas por muchos millones de euros. Consejeros, directivos, y que yo sepa no se ha tomado ninguna medida cautelar contra nadie. Nadie ha pisado la prisión, salvo el presidente de la CEOE, Díaz Ferrán, que afortunadamente está donde tiene que estar, cumpliendo una medida de prisión provisional, pero es una excepción, porque la inmensa mayoría de las entidades de ahorro, las Cajas de Ahorro, que ha sido el cauce de ahorro de las clases populares, engañadas de forma organizada, calculada y sistemática… Y lo único que ha pasado es que les han abierto unas causas cuyo horizonte de resolución es muy lejano.
.- Ponga un ejemplo, por favor
En Cataluña hay un caso paradigmático, cual es el expolio del Palau de la Música, una institución relevante de la cultura catalana. Pues bien, en julio hará cinco años que la Fiscalía junto con la policía judicial entró y registró el Palau. Hoy, prácticamente en febrero de 2014, no se sabe cuándo se celebrará el juicio contra los responsables de ese expolio que ya están formalmente acusados. Si esto se sitúa en una perspectiva normal, quiere decir señalamiento del juicio, recursos ante el Tribunal Supremo, sentencia del Tribunal Supremo… estamos hablando de otros cuatro años más. No se puede aguantar tanto descaro de los responsables, ni esa atonía de la Justicia.
“EN ESPAÑA SE PERSIGUE ANTES A LOS POBRES QUE A LOS RICOS”
.- ¿Hay más gente honesta que deshonesta en la administración de la Justicia española?
Pienso que la mayor parte de los jueces son honestos, pero lo que sí hay es una proporción mayoritaria de la magistratura, y ahí incluyo a la Fiscalía, de pasividad que conduce a la complacencia con los abusos cometidos desde el poder, económico financiero o político, me da igual. ¿Por qué? Pues porque tenemos una clase judicial para la persecución de la delincuencia convencional, pero no para la persecución de la delincuencia de cuello blanco.
.- Está diciendo que se persigue judicialmente con más facilidad a los pobres que a los ricos
Eso es. Tenemos algunas excepciones que podemos situar territorialmente incluso. En Palma de Mallorca, algunos en Madrid, otro cuantos en Málaga, y algunos más en otros lugares. Pero en general, tenemos una magistratura y una fiscalía preparada para la persecución de la delincuencia de los pobres. Y esto no es demagogia. Se persigue esa delincuencia que no exige ni preparación profesional específica ni grado alguno de valentía, porque esa persecución viene dada por la policía.
.- ¿Por qué esa falta de coraje?
Tienen miedo a enfrentarse a los poderes financieros o políticos de este país. Hablando vulgarmente, hay cierto temor a complicarse profesionalmente su vida tocando determinados resortes de poder que un día, antes o después, puedan perjudicarles a la hora de ascender para ocupar un puesto en el organigrama del poder judicial.
“JUECES ENÉRGICOS FRENTE A LA DELINCUENCIA FINANCIERA”
.- Los jueces son hijos e hijas de esta sociedad. ¿Con unos jueces distintos tendríamos un país diferente, mejor?
Evidentemente. El ejemplo que hubiesen dado los jueces reaccionando de una manera mucho más enérgica ante, por ejemplo, la delincuencia financiera que abusa de su poder económico desde la empresa privada, nos hubiese traído un país en el que mucha menos gente se hubiera empobrecido por su culpa. Ese es un poder terrible, porque controlan el Mercado, controlan el movimiento del dinero, un sinfín de resortes enormes que influyen sobre el conjunto de la ciudadanía. Ni la magistratura ni la fiscalía han tenido la respuesta enérgica que cabía esperar… Salvo la firme decisión que tomó el juez Silva contra el banquero Blesa, todas las demás adoptadas contra entidades financieras encausadas (Bankia, Caja de Ahorros del Mediterráneo, Caja de Galicia, etc) han sido sin medidas cautelares. Recuerdo ahora que cuando Mario Conde expolió Banesto, ingresó en prisión preventiva y luego fue condenado a veinte años en un plazo bastante corto. No lo olvidemos.
.- ¿Los delitos cometidos por los responsables de esas entidades financieras encausadas son similares a lo que cometió Mario Conde?
Es lo mismo, no lo olvidemos. Diría incluso que más, porque el expolio causado no ha sido al propio banco, como Mario Conde hizo con Banesto como entidad, sino que éstos tienen el agravante de que el expolio causado ha sido contra los “pobres desgraciados” que han ido a subscribir preferentes y deuda subordinada creyendo que iban a invertir sus ahorros de forma beneficiosa, cuando lo que han hecho ha sido estafarles, perdiendo todos sus ahorros. Sin embargo estos han sido mejor tratados que Mario Conde.
Usted ha luchado, está luchando y va a seguir luchando. Este es tu tajo, este es su grito contra lo que está ocurriendo. Y, al parecer, no va a abandonar
Toda mi ocupación la pongo en esta inquietud. Este tema y, como sabes muy bien, el tema de la defensa de las víctimas de la Dictadura franquista. Me parece innoble cómo en España se están desarrollando estos asuntos. Estamos como país llamando la atención de los organismos internacionales al mismo nivel que Libia, Siria, Nepal… Es decir, España está situada en un marco de naciones a los que la ONU les da un tratamiento de países desgarrados por guerras civiles hoy.
.- Si en el año 1977 le hubieran preguntado, cuando aún era un fiscal de 40 años, si era optimista para con este tema de las víctimas del franquismo…
En 1977 era optimista. Confiaba en una buena Constitución, en leyes de amparo a las víctimas, petición de perdón y un total reconocimiento al dolor causado…
“VALE LA PENA LUCHAR… Y LA ALEGRÍA”
.- ¿Cuánto optimismo mantiene hoy, en 2014, cara al futuro?
Antes me has hablado del último libro de Marcos Ana “Vale la pena luchar”. Yo creo en esto, en que vale la pena luchar por todo lo que estamos hablando, en defensa de las víctimas, contra la corrupción política y financiera. Luchar, luchar porque no podemos permitir que se extienda esa mancha de impunidad que domina en estos momentos España cuando se habla de la delincuencia de la corrupción, de la delincuencia económica, la financiera… eso que Sutherland, el famoso penalista norteamericano, llamó en 1939 “personas respetables”, pero que en el fondo son detestables porque están cometiendo toda clase de abusos. Mientras esto esté ocurriendo, y no se les persiga por ello, habrá que seguir insistiendo en la verdad de lo que vemos.
«EL GRUPO FAMILIAR BOTÍN»
.- Señalaría alguna buena actuación judicial, una remarcable
Hoy podemos tener un ejemplo de quehacer profesional en los autos del prestigioso juez Andreu, de la Audiencia Nacional, sobre el fraude del grupo familiar Botín, en el que están numerados todos los miembros de la familia con las cuentas y el patrimonio que tenían en Suiza, y cómo lo han regularizado para no ser perseguidos penalmente. Ahí tenemos un ejemplo de que había un juez honrado y valiente. De igual manera había un código penal hecho a la medida de los defraudadores, que ha permitido que toda una familia entera (de doce miembros) tuvieran su patrimonio colocado en Suiza “a buen recaudo” del pago de impuestos en España, pero que sin embargo por el trato de favor que dispensa el código penal al fraude fiscal se han visto libres de toda culpa y toda responsabilidad. Esto ocurre en un país donde los autores de los robos ‘de tres al cuarto’ están todos en la cárcel. Eso no es justicia.
.- Es una alegría escucharle decir con Marcos Ana que “Vale la pena luchar”, porque al hacerlo podemos sentir que no estamos tan lejos de hacer justicia, si otros tuvieran su coraje y su sentido ético.
Vale la pena luchar, Julio. Y la alegría.